Nuestra actividad evoluciona rápidamente y la confianza que hemos logrado establecer con nuestros socios no deja de traernos nuevos mercados. Por lo tanto, estamos constantemente en busca de nuevos talentos para estos trabajos: ensamblador-montador, electricista-cableador, mecánico, amolador, cerrajero, soldador, tubero. Con el objetivo de ahorrarles tiempo y permitirnos ser más eficientes en su futuro reclutamiento, hemos creado currículums normalizados que les dejamos el gusto de completar. ¡La pelota está en su tejado!
El montador mecánico, según su puesto de asignación, realiza diversas operaciones simples de ensamblaje de conjuntos mecánicos y/o eléctricos a partir de instrucciones de trabajo.
El electricista cableador realiza operaciones de instalación, tendido de cables de tensión baja o alta y MALT en diferentes redes, adaptándose a las restricciones del terreno.
El mecánico lleva a cabo operaciones de mantenimiento preventivo y correctivo, con dominio mecánico, de equipos, instalaciones y equipos tradicionales o automatizados.
El rectificador perfecciona y reduce mediante abrasión las asperezas y rugosidades de las láminas, perfiles y/o tuberías, siguiendo las normas del arte y la seguridad, así como los imperativos de producción (calidad, plazos, etc.).
El cerrajero posiciona y ensambla conjuntos o subconjuntos metálicos y realiza puntos de soldadura de hasta 2 centímetros (piezas, estructuras...) de acuerdo con los planos técnicos, para preparar la intervención de los soldadores.
El soldador realiza la preparación, el punteado y la soldadura de piezas metálicas (acero) mediante uno de los siguientes procesos: 111, 135, 136 y/o 141.
El tubero realiza e instala redes de tuberías conductoras de fluidos líquidos o gaseosos.
El jefe de equipo coordina y supervisa la actividad de un equipo como referente técnico, funcional y jerárquico. Garantiza el nivel de rendimiento del equipo y el logro de objetivos en cuanto a calidad y plazos.
El jefe de obra coordina y supervisa la actividad de un equipo como referente técnico, funcional y jerárquico. Garantiza el nivel de rendimiento de los equipos y mide su eficacia. Garantiza el cumplimiento de los objetivos de calidad y plazos. Es el punto de contacto entre la empresa y el cliente.